¿CADA EMBARAZO CUESTA UN DIENTE?
¿Puedo ir al dentista estando embarazada? ¿Debo esperar a tener al bebé para acudir al dentista? ¿Afectan mis caries al mi futuro bebe? Estas y otras son algunas de las preguntas que se hacen las mujeres embarazadas, y vamos a intentar aclarar algunas de estas cuestiones.
“Un embarazo cuesta un diente”, es un mito. En contra de la creencia popular, no hay una relación directa entre la caries y el embarazo. El bebe necesita calcio, lo obtiene de la dieta de la madre, no de los dientes de ella. Lo que sí es verdad es que puede haber mas susceptibilidad a ella, ya que ciertas bacterias aumentan su proliferación durante el embarazo, la saliva se vuelve más ácida, sobre todo en mujeres que sufren vómitos, aparte de que se come más veces y alimentos que son más cariogénicos.
No hay que olvidar que la caries es una enfermedad multifactorial, que aunque la genética influya sobre ella, lo que se hereda es la tendencia a padecerla, no la caries en sí, por lo que en ningún caso el bebé nacería con caries. Hay que tener en cuenta que al ser las bacterias otro de los factores causante de la caries, se puede trasmitir por lo que hay en todo momento que evitar limpiar el chupete del bebé con la saliva de la madre, probar el biberón o la comida antes de dársela.
Los mayores cambios hormonales y físicos en una mujer ocurren durante su embarazo. Estos cambios también ocurren en la cavidad bucal, por lo que un buen diagnóstico a tiempo puede evitar mayores problemas tanto para la salud dental de la mujer embarazada, como para el futuro bebé. Algo tan sencillo como una buena limpieza profesional puede disminuir el riesgo de tener un parto prematuro. Por lo que la Dra. Verónica Peña Velasco, que se encuentra a la cabeza de Clínica Dental Velasco, recomienda una limpieza dental durante el segundo trimestre del embarazo. También recomienda a las mujeres que planeen estarlo, que se sometan a una revisión dental que incluya una evaluación del estado de las encías.
Estando embarazada se puede y se debe acudir al dentista, siempre y cuando se tengan en cuenta los distintos tratamientos a realizar y en qué etapa se van a realizar los mismos. Ya hemos aconsejado anteriormente, que se debe acudir en el segundo trimestre, ya que durante el primer trimestre de gestación se deben evitar medicamentos y radiografías porque pueden afectar al buen desarrollo del futuro bebé, por lo que la madre en este trimestre se debe realizar únicamente los tratamientos de urgencia que no se puedan postergar. Durante el segundo trimestre es cuando la mujer embarazada se encuentra en un periodo más estable y es en esta etapa del embarazo cuando se debe realizar aquellos tratamientos que sean necesarios y podría sacarse radiografías, siempre y cuando utilice delantal debidamente plomado. Una vez ya en el tercer trimestre se realizaran únicamente tratamientos de urgencias, y en sesiones lo más cortas posibles. Si se necesitara anestesia local, debe de ser sin vasoconstrictor.
Durante todo el embarazo es muy importante mantener una correcta higiene dental, empleando hilo dental y/o cepillos interdentales, así como un buen colutorio de mantenimiento, para ayudar a la eliminación de bacterias y combatir la gingivitis. Esta es una afección que se manifiesta muy a menudo durante el embarazo como una inflamación y sangrado de las encías. Si ya se sufre de gingivitis antes de quedar en estado, esta se agrava, sobre todo durante el segundo trimestre y suele remitir tras el parto, pero siempre es muy importante realizar una visita al dentista.